CREPÚSCULO

Hay tres cosas de las que estoy
completamente segura.

Primera, Edward es un vampiro.

Segunda, una parte de él
se muere por beber mi sangre.

Y tercera, estoy total y perdidamente
enamorada de él.


TODOS LOS PERSONAJES SON
DE LA FABULOSA MENTE DE
STEPHENIE MEYER

martes, 23 de febrero de 2010

16. Reconciliación.

Esa noche lo pasé mal, muy mal. Edward no estaba a mi lado, dado que él me gritó y luego yo no le dejé entrar. "Soy una mala perosna", pensé. Debía disculparme con él enseguida. Me levanté y me dí una ducha bien fría y muy rápida. Salí de la ducha envuelta en una toalla. Pero, ¿cuál fue mi sorpresa? Él me esperaba de pie con los ojos como platos.

-Lo siento debería haber llamado.-se disculpó Edward. Se fue hacia la puerta, lo agarré del brazo y le di la vuelta.

-No te tienes que disculpar por nada. Soy yo la que ayer te hechó de aquí.-le dije muy apenada.

-Bella...yo te grité, cosa que no debería haber hecho porque estabas muy alterada-iba a protestar, pero me calló la boca con dos de sus dedos fríos y prosiguió-. Lo siento mucho, no fue mi intención.

No pude aguantar más y le besé con toda la fuerza que pude. Él me respondió al beso. Su aliento frío en mi boca fue lo mejor. Pero sentí que mi toalla se deslizaba hacia abajo. Me separé de Edward y miré hacia abajo, ¡mi toalla estaba en el suelo! Miré a Edward, pero no estaba. Me reí y recogí la toalla. La enrrollé en mi cuerpo y fui hacia el baño. Me vestí en un tiempo record. Cuando salí del baño vi  a Alice.

-Edward ha salido fuera del hotel y creo que ya se porque.-dijo con una sonrisa pícara.

-Alice no tengo tiempo.-dije mientras salía de la habitación.

Recapacité, sabiendo que él podría evitarme facilmente, y decidí que fuera él el que subiera.

-¿Sabes, Alice? Mejor que suba él. ¿Te importaría decirselo?-le dije mientras entraba de nuevo.

-Claro que no me importa.-dijo con una sonrisa mientras salía de la habitación.

Solo habían pasado dos minutos y Edward ya estaba en mi habitción con la cabeza agachada. Yo me dirigí a la cama y le invité a que se sentara conmigo dánole palmadas a la cama.

-Siéntate conmigo.-susurré y Edward lo hizo.

Esperé hasta que me miró.

-Edward...¿ a caso te incómoda que yo esté desnuda en frente tuya?

Él carrapeó muy fuerte, que casi me pareció un gruñido.

-Bella... sabes que si fuera humano estaría verdaderamente sonrojado, ¿no?

-No tendría porqué. Llevamos juntos el tiempo suficiente para que confiemos mutuamente el uno en el otro en ese tema.

Edward se quedó pensativo.

-Pero bueno...¿desde cuando das tu los consejos?-dijo en un tono burlón. Me reí pero luego me puse seria y Edward lo notó.

-No soy lo sufucientemente bonita, ¿verdad? Es eso.-comencé a aterrarme.

-No Bella, mi amor, claro que no. Tu eres la más hermosa de todas las flores. La verdad es que pensé que te morirías de la vergüenza.

-¿Eso es todo? ¿Seguro?

-Claro.-dijo, me pareció que no era verdad pero daba igual está conversación no iba a terminar.

2 comentarios:

  1. JAJAJA TAN LINDO EDWARD ESCRIBE PRONTO PLIS

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  2. ola,soy de la historia continua...me encanto el capi pero muy cortito despues de no publicar tanto tiempo...se que pueden haber diversas razones pero igual me dejaste con la intriga kjakajkajka publica pronto por favor.cuidate y sigue asi.

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